jueves, 8 de noviembre de 2012

Reviví

Por estos tiempos estoy contenta, soy feliz. Otra vez he vuelto a llenarme de sueños (¡de sueños nuevos!) y a invertir horas pensando proyectos, hilvanando ideas.


La aventura y la incertidumbre de toda la historia del doctorado me dejaron exhausta. Estaba como apagadita, triste. Dejé hasta de construir esos apasionados castillos de aire que siempre me han acompañado. Y llegué a pensar que nunca volvería a ser la de antes, que con la juventud primera se me había ido la esencia de mi ser. Y estuve aún más triste.

Y cuando llegué acá, a "America" como dicen ellos (¡no tienen idea que yo siempre he vivido en América!), pensé también que el tiempo de mi alegría no se vislumbraba en el horizonte… no en este país de gente tan distinta, y tan lejos de mi tierra. Y pensé otra vez que nada me devolvería la pasión que había sentido alguna vez. Pensé que mi alma proactiva que hasta ahora me había infundido fuerzas para luchar por lo que creo y trabajar por sueños a largo plazo en los que ya nadie cree, se había separado irreparablemente de mi ser.

Pero logré adaptarme y avanzar. Y entonces, este mundo nuevo comenzó a develarse para mí. Y empecé a asimilar mi vida de este otro lado del hemisferio. Conocí gente y comencé a empaparme de esta nueva historia. Hasta que descubrí que esto que ahora hago me encanta. Me encanta lo que leo y lo que aprendo cada día, me encantan mis clases y el enfoque que tienen, y me siento tan expectante y con tantas expectativas de lo que se viene. Además, las personas son tan amables, ¡y vivimos tan cómodos con Marcelo! Siento que estoy en el lugar correcto, y me siento parte de esto. Realmente pareciera que nací para esto.

Y así volví a sentirme viva y volví a soñar; volví a ser yo. And, I'm moving forward now, like Obama!

Ya tengo 26 y aún hay mucho por hacer.


Carla.

PD: No se confundan. Aunque este lugar es hermoso, cautivante, y prometedor, nada hay como mi Chile amado, la patria, la tierra de la que me siento parte, atada… y a la que a cada segundo añoro retornar. Este sueño mío (que ahora es mi realidad) fue por ti, mi Chile, y siempre lo seguirá siendo. Estoy aquí de paso, para aprender y para crecer, pero todo es por Chile (gracias a él y para él... también gracias a Él y para Él, actually).

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