martes, 19 de agosto de 2008

No es suerte; es bendición


Desde el principio de los tiempos el hombre se ha preguntado el porqué de su existencia; de dónde viene, por qué está aquí. Miles han tratado de encontrar una respuesta. Hoy, tras milenios de desvaríos, la única certeza es que nada está claro. De aquí cada uno con su propia creencia, con su propio afán. Todos respetables.


Algunos de nosotros creemos que estamos aquí por algo, con algún propósito, algún fin. Pareciera que cada quien tiene una misión en este mundo. Yo me inclino a pensar que cada cual tiene una razón de ser. Muchas veces "siento" que tengo un propósito que cumplir entre esta revoloteada maraña de seres humanos. Pienso que vine por "algo" y para algo. Creo que la vida, durante estos veintidós años en que me ha abrazado, ha intentado gritarme un mensaje que no he podido decifrar.

Suelen sucederme lo que algunos definirían como "golpes de fortuna". Pareciera que hay "algo", o "alguien", que quiere que nosotros cumplamos con algún extraño propósito que el cosmos designó para nosotros. A veces siento que nada de lo que me sucede es porque sí, o puramente fruto de mis decisiones propias. A veces siento que hay "algo" más allá que me ayuda, que me encausa...que me hace retornar a una vereda que desconozco.

Coincidencias, suerte, el azar, bendiciones, el destino, la divina providencia...da igual. Lo cierto es que no soy la única que desvaría con esto.

Aún no logro descubrir qué carajo me tocó a mí, pero tengo la certeza en mi interior de que existo con algún sentido, que tengo una misión que cumplir.

Muchas veces pienso que no soy sólo yo. Que no estoy sola. Que ese "algo" que me creó con algún propósito me ayuda continuamente a lograrlo, me vigila, me protege.


A ese "algo" elijo llamarle "Dios", porque suena bonito y porque coincide con los valores que un Jesús de antaño proclamó en los desiertos. Tú puedes llamarle "fuerza positiva", "buenas vibras" o cómo quieras, pero nadie me saca de la cabeza que es del mismo Dios de quién estamos hablando. Es sólo que está tan estigmatizado erróneamente que crees que seguirle es predicar en las calles o cantar alabanzas en un templo.

No, seguirle está lejos de eso. Seguirle es un estilo de vida.



Carla.

4 comentarios:

Romina dijo...

Estoy segura que a lo que vienes es a algo grande, a algo bueno, algo que te mereces por tu perseverancia y esfuerzo y que Dios pensó para ti hace ya más de 22 años.

La última vez que te conectaste a msn y coincidiste conmigo, decías: chata de vivir...
Y aunque no te dije nada, me preocupe por ti, y he pensado en ti varios días. Pero al leer estas palabras tuyas de ahora, me doy cuenta de que alguna bendición te está haciendo ver con más claridad las cosas.

Hermosa, no te rindas nunca, siempre lucha por conseguir tus sueños, vuelve a levantarte cada vez que sea necesario.

Yo confío en ti.

Tu amiga de ayer, de hoy y de siempre.

Un abrazo.

Romina

Boris Cruces dijo...

Aunque creo que escibes muy hermoso y que sin duda Dios esta usando ese talento, tengo algo que decirte.Me caes muy bienLeí tu articulo con respecto a  las palabras Dios y el pecado y me gustaria ,solo comentar unas cositas.Sabes, en realidad nose cual sera tu posicion definitiva con respecto al pecado,pero pude intuir algo.Concuerdo en que el pecado es destructivo tanto para el creyente como para el no creyente.(pues todos pecamos)y que esta destruccion es por causa de la caida de Adan(tu ya lo sabes).Gueno el punto es que para mi sí hay un infierno y que por causa del pecado se viene a muerte eterna. Sabes, creo que en la iglesia de hoy en dia se enfatiza en demasia el mensaje POSITIVO de las Buenas Nuevas, y que por nada del mundo esta mal, pero se hace profundamente necesario hablar y enseñar que la raiz de todo mal es el pecado y no es otra cosa que aquello.Muchos psicologos y personas del ambito secular le dan una explicacion a diversos males del ser humano(nombres clinicos) pero no dan solucion(solo  ramas,remedios o un actúa de tal manera).Ahora tu y yo sabemos cual es la solucion y es recibir a Cristo en nuestros corazones,orar y leer su palabra para mantenernos libres de esa carnaza que llevamos dentro,pecado,forma de vivir sin conocer a Cristo,etc etc.El pecado es lo que te ha llevado todos estos años a sentirte como te sientes, que aveces no sabes que hacer,pensar incluso que puedes estar loca,el pecado es lo que te lleva a difariar entre las diferentes posibilidades que se te aparecen, el pecado lleva a matarse a las personas, el pecado las aleja de Dios, el pecado las lleva al infierno(y hay que hablarlo,pues es Biblico) el pecado lleva ala inmoralidad sexual, el pecado lleva a la "depresion" el pecado lleva a la droga,el pecado lleva al alcoholismo, el pecado hace robar, el pecado hace pelear a nuestras familias, el pecado hace que a veces no quieras ir a la iglesia, el pecado te hace comer mas de lo normal, el pecado te dice "inutil".......el pecado.Querida amiga,me gustaria haber escuchado una descripcion mas detallada del pecado y no una simple apreciacion,pues recuerda que de eso te estas liberando todos los dias con la mano de Cristo.Y no es por ser religioso,es por llamar a las cosas buenas buenas y a las malas malas.Es simple.Quizas no tengo idea de lo que hablo,pero mi experiencia de vida me ha ayudado a entender que no son temas para abordarlos simplemente.Ojala puedas hablar con respecto a ello.Otra cosa que no entendi:Si tu eres Cristiana y crees en Dios y en la biblia ¿Crees que el hombre viene de Chita?Disculpame por ser incisivo pero me gustaria ver tu areciacion mejo explicada...o tu posicion.Cuidate Te Quiero en el amor de Cristo

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Rubén Elgueta R. dijo...

Wow!

No sabía que tenías blog, jejeje... bueno amiguilla, paso a dejarte un saludo, escribes muy bien, así es que va para ti un saludo y recibe mis felicitaciones por el blog, por cierto que hiciste un buen trabajo.

Yo no tengo blog personal, sólo los empleo para temas de la universidad. Francamente no tengo mucha gracia para estas cosas, pero hago lo que se puede.

Un abrazo, muchas bendiciones y saludos al Marce.

Rubén.